Os voy a contar una historia que ha cambiado por completo mi vida, desde que la conocí soy otra persona. A mejor.
Kakana. Gennin. 13 años. Su sueño es ser un gran ninja, pero no sabe que su vida cambiará cuando a los 15 años se apunta para ser cocinero.
Hanabi. Gennin. 13 años. Ella quiere tocar algún instrumento, y ama a Itachi, pero no sabe que su vida cambiará a los 15 años cuando conozca a Kakana en las cocinas.
A los 13 años, Hanabi se aburre en casa de hacer siempre lo mismo, le compraron un bajo, y está con Itachi, pero se aburre. Quiere probar algo nuevo, así que empieza a buscar un trabajo y lo encuentra. Le apetece ser cocinera.
Pasadas unas semanas, Kakana hace la comida para su hermano Naruto, y éste, al ver que tiene talento para la cocina, le ofrece un puesto de cocinero en las cocinas de Konoha.
-La comida me gustó, ¿te apetece ser cocinero en nuestras cocinas? Tienes compañera ^^
-¡Acepto el trabajo!
-Je je. Mañana mismo empiezas.
Kakana, ilusionado, al día siguiente va a prepararse cuando entra Hanabi. Hanabi es tímida y le dice:
-Ho-...hola... -///-
-Hola, soy Kakana. (Le sonríe). Parece que vamos a ser compañeros de cocinas, ¿no? Encantado de conocerte.
Kakana le ofrece la mano para saludarla, y ella tímida se lo da.
Pasados los días, entre ellos crece la confianza, y ella no parece tímida. Se iban a preparar para hacer la comida de inauguración de las villas, uno al otro se ayudaban, y entró una cocinera nueva, ayudó muy poco y pronto se tuvo que mudar, por lo que dejó el trabajo.
Cuando terminaron de preparar la comida, Hanabi pidió permiso a Kakana para quedarse con Itachi.
-Kakana-kun, ¿puedo irme con Itachi?
-Por supuesto, hemos terminado de cocinar. Luego vamos al baile, ¿vale?
-Síi~! ¡Gracias! (Le sonríe).
-De nada, es tu pareja, tienes todo el derecho a estar con él ^^.
Aquí es cuando Kakana empieza a sentir algo por Hanabi. Ella se besa con Itachi, y Kakana no mira porque se siente algo solo. Hanabi se da cuenta de su reacción, pero sigue con Itachi. Aunque también se siente poco a poco atraída por Kakana.
Llega el día del baile, y Hanabi se va con Kakana a la casa de éste para ponerse el traje de baile. Hanabi se prepara, y Kakana también. Cuando Hanabi sale, Kakana dice:
-¡Estás preciosa! ¿Yo cómo estoy?
-¡Muy guapoo~!
-Gracias (sonríe).
Empiezan a bailar, y uno se divierte mucho con el otro. Llega Itachi, y Hanabi se pone a bailar con él. Kakana se siente de nuevo solo, pero luego Itachi se vuelve a ir y Hanabi vuelve a bailar con Kakana. Se lo pasan muy bien, y cuando llegan, quedan molidos y se van a descansar a las aguas termales. Kakana dijo:
-Me lo he pasado muy bien, ¿y tú?
-¡Sí~!
Pasado el rato, Hanabi quedó dormida. Kakana la sacó del agua y la durmió, dándole un beso en la frente.
-Que duermas, Hanabi-chan.
Luego despertó, y ella se fue con Kakana a ver una película de Naruto. Mientras la veían, Hanabi se iba acercando más a Kakana, y éste se sonrojaba. Mientras comían palomitas, Kakana se atragantaba, pues Hanabi le atraía. Al terminar la película, los dos se fueron al gimnasio que tenía Kakana en su casa en un tercer piso, y empezaron por la sauna, siguieron en el jacuzzi donde Hanabi tropezó y Kakana corrió a curarle la herida que se hizo en el mentón.
Luego, los dos se metieron en el jacuzzi y Kakana trajo para beber.
Kakana se puso rojo para decir algo que Hanabi no se esperaba...
-Hace mucho que nos conocemos, Hanabi, en realidad. Aunque sólo hemos empezado a hablar cuando éramos compañeros de cocina. Nos llevábamos muy bien, nos ayudábamos el uno al otro... Cuando fuimos a bailar los dos éramos una pareja perfecta, bailábamos muy bien... Sé que estás con Itachi, pero esto es muy importante... Cuando tu estás conmigo, el aburrimiento que siento se desvanece... Si no estás conmigo, no me siento feliz, ni importante, me siento solo... tampoco tengo un hombro sobre el que apoyar mi cabeza, ni un regazo en el que dormir a gusto... Lo que te quiero decir con todo esto es... que te quiero más que a mi vida.
Hanabi, al oír las palabras de Kakana, bajó la cabeza, y dijo:
-Etto... si te soy sincera, cada vez que te veo, una extraña sensación pasa por mi cuerpo y mi corazón se acelera de repente. Me gusta todo de tí, tus ojos, tu pelo... Bueno, termino y te lo resumo en dos palabras: TE AMO.
Kakana se sentía emocionado. Antes de intentar besarla, le dijo:
-Me haces el hombre más feliz del mundo.
Se besaron, Hanabi se puso roja y se desmayó. Kakana estaba preocupado, pero cuidó de ella hasta que se recuperó. Cuando se recuperó, dijo:
-¡Tengo que ir a por mis cosas a la casa de Minato! ¡Ahora vuelvo!
Kakana la esperaba. Hanabi llegaba triste y con la cara llena de lágrimas, y ella echaba de menos los momentos que echaba con Minato. Kakana la consoló, le limpió las lágrimas con un trapito y luego dijo:
-Ha sido duro dejar la casa de Minato, donde habías vivido tantos momentos... pero aquí te acostumbrarás ^^ Por cierto, te dejo una copia de las llaves de mi casa, ya que también es tuya =)
Ella la aceptó y luego se besaron, como cualquier pareja. Se sentían muy bien, el uno se amaba al otro. Se ducharon juntos, y vivían muy bien, muy felices.
Pero tambien hay que decir que no he dicho que haya cambiado mi vida como personaje, sino también como persona porque yo también le dije a Yaiza (Hanabi) que la quería. Ella ahora es muy feliz, y yo también, y, aunque vivimos algo lejos, nos veremos pronto.